Buenas a todos!!
De un tiempo a esta parte he estado trasteando con uno de mis juniperos rastreros.
Es el más gordito de todos y al que más partido le podía sacar a corto plazo, por eso me gustaría deleitaros con alguno de sus cambios.
Su origen remonta a unos restos de poda esquejados que saqué adelante allá por 2015.
Resto de poda esquejado. 2015. |
Tras cerciorarme de su arraigo, al año siguiente lo trasplanto a colador.
Como bien sabéis, los trabajos de raíces en coníferas son delicados, por eso no conviene tocarle mucho las narices después del mismo.
Los dos años siguientes (2016-17) de "post-operatorio" los pasa de parranda en el jardín.
En el inicio de brotación primaveral de este año es cuando decido arrestarlo y someterlo a interrogatorio.
Febrero 2018. |
Como se puede ver, la hoja acicular delata sus joviales y flexibles ramas, las cuales nos ofrecerán un rato muy ameno durante su primera formación.
El diseño del benjamín apuntaba marcadas directrices, cascada/semicascada o azotado por el viento. Lo que no cabía recurso alguno, era sacar algo de partido al corte superior de la estaquilla.
Corte - tocón a disimular. |
Comienzo a descortezar la parte de madera de muerta, en busca de la vena viva que alimenta su rama más potente.
Descortezando en busca de vena viva. |
Esta vena no tarda en aparecer, facilitando la retirada de corteza para la formación del futuro jin.
Recorrido de vena viva por el tronco. |
Una vez delimitada la parte viva de la muerta, astilladora en mano, saco punta y desgarro la madera en el sentido de la veta para formar el jin.
Formación del jin. |
Por lo pronto, solo queda alambrar y redistribuir la fuerza de las ramas mediante poda.
Colocación de alambre y tensores. |
Tras su primer trabajo, así de majete queda el amigo.
Tras el primer trabajo. Febrero 2018. |
Por el momento los cambios no son muy sustanciales, próximamente os iré mostrando lo bien que se porta durante este año.
Hasta más ver compañeros!! y nunca mejor dicho!!!
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